Hubo una época en la que la zona de la Montaña Palentina era solo conocida por los expertos senderistas que subían al Espigüete y al Curavacas, pero esa época ha llegado a su fin. La Montaña Palentina está llena de rutas de senderismo aptas para todos los públicos y, sobre todo, para los niños y niñas que empiezan a disfrutar de la naturaleza.
Además, una cosa que nos encanta de esta zona es lo bien preparada que está para realizar senderismo: aparcamientos en el punto de partida de las rutas, señalización para llegar con el coche y señalización durante todo el recorrido a pie. ¡Ya nos gustaría que siempre se tuvieran siempre estos detalles con los senderistas!
Está claro que la Montaña Palentina invita a calzarse las botas y nuestros pequeños senderistas no van a quedarse fuera de estas excursiones. Estas 6 rutas servirán para abrir boca a los que, quién sabe, quizás en unos años estén ascendiendo una de sus grandes cumbres.
1. Cascada de Mazobre
Creemos que es la ruta más famosa de la Montaña Palentina, pero no por ello tiene menos encanto. Ir bajo los pies del imponente Espigüete hasta esta bonita cascada nos hace darnos cuenta de donde estamos y de la fuerza del paisaje que tiene esta zona. La ruta perfecta para enamorarnos de la Montaña Palentina desde bien pequeños.
2. Ribero Pintado
En esta ruta visitaremos una pared que es como un tapiz tejido por la naturaleza. En este mosaico tan particular predominan los tonos rojizos y negros que crean innumerables formas y texturas que varian dependiendo de la luz y el momento del día. Es recomendable visitar el Ribero Pintado por la mañana y en días soleados para apreciar mejor los colores. Si ha llovido previamente, los colores serán aún más vivos.
3. Bosque fosilizado de Verdeña
En la localidad de Verdeña se encuentra esta pared sobre la que aparece impreso un bosque de hace 305 millones de años, casi nada. Para llegar hasta este bosque fosilizado hay que dar un paseo rodeados de árboles y montañas que bien merece la pena acudir con los más peques de la casa.
4. Roblón de Estalaya
Una de las rutas más sencillitas de la Montaña Palentina que nos lleva hasta el roble más longevo de la zona, con razón es bien llamado: “El Abuelo”, todo un símbolo de sabiduría y experiencia que ha sobrevivido a rayos y al hacha de los humanos. Su altura es de 17m y su perímetro en la base de 10,6m. Pero el espectáculo no acaba aquí, las vistas del pantano de Requejada a los pies de las grandes montañas es lo más gratificante del sendero.
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Rutas por la Montaña Palentina para niños grandes o acostumbrados a andar
Estas rutas las hemos apartado para dejar claro que son para niños y niñas no muy pequeños y acostumbrados a andar. Esto no es porque tengan algún tipo de dificultad técnica, realmente son muy sencillas y sin ningún tipo de peligro. La única diferencia, con las rutas por la Montaña Palentina con niños, anteriores es el desnivel, que es un poco más pronunciado, pero si los pequeños de la casa ya son unos pequeños senderistas las podrán recorrer y disfrutar como cualquiera de los grandes.
5. Cueva del Cobre
Para hacer esta ruta con niños iremos, muy poco a poco, bajo la mirada de picos elevados, a través de uno de los rincones más ocultos y sorprendentes de la Montaña Palentina hasta llegar a una cueva, con una entrada enorme, en la que nos adentraremos un poco para oír el paso del Pisuerga bajo la montaña. Antes se pensaba que su nacimiento era este lugar, pero en realidad nace más arriba y emerge en este punto.
6. Tejeda de Tosande
Esta ruta en el corazón de la montaña palentina sorprende muy gratamente y no solo por los tejos milenarios que custodian el bosque, ¡sino por las vistas! Desde el mirador, el punto más arriba del itinerario, se puede divisar todo el paisaje que nos rodea desde Peña Labra hasta el Curavacas. Reservaros el bocata para este momento porque bien merece la pena.